Hace unos días terminó la copa América de futbol y Colombia quedó en tercer lugar. Un hecho para destacar fue la partición del jugador Luis Díaz, descendiente de la comunidad Wayúu. “En el 2015, Luis tenía 18 años, fue la figura de la Selección Colombia que jugó la Copa América de Indígenas y estaba desnutrido. Desde que nació en la ranchería de Barrancas en La Guajira, este Wayúu presentó un peso muy por debajo de su ideal. En el desierto, el pequeño se distraía escuchando la música de Diomedes Díaz. La sombra del Cerrejón, la mina más grande de Colombia fue secando el río Ranchería que alimentaba a su familia, a sus amigos, a su pueblo. Siempre tuvo sed, sobre todo cuando se dedicaba a hacer lo que más le gustaba en la vida: jugar al fútbol bajo el calor insoportable de La Guajira”.
Luis tuvo una oportunidad gracias al destino, porque ese torneo de futbol de comunidades indígenas sólo se jugó una vez, en el 2015. La Copa Americana de Pueblos Indígenas se disputó por primera y única vez en Chile, en 2015. Fue la principal competencia futbolística entre selecciones nacionales indígenas de América del Sur organizada por la Conmebol, institución administradora del fútbol en Suramérica. El torneo se llevó a cabo entre el 16 de julio y el 25 de julio. Participaron 8 selecciones indígenas y Colombia quedó subcampeona, luego de perder la final frente a Paraguay.
La selección estaba dirigida por 2 exjugadores del futbol profesional colombiano; Jhon Díaz, más conocido como el “Pocillo Díaz” y Carlos Valderrama “El Pibe”. Cuando el técnico Díaz conoció a “Lucho” lo vio como la mayoría de niños y jóvenes de la Guajira; desnutrido y tan raquítico que pensó que no podía hacer parte de la selección. Sin embargo, gracias a sus cualidades deportivas hicieron que fuera incluido en la selección donde le cambiaron su dieta alimenticia para que ganara peso y demostrara todas sus cualidades en el torneo. Casualmente, desde el 1 de Julio, un grupo de 8 jóvenes pertenecientes al Movimiento Juvenil Diverso de la Guajira se encuentran en huelga de hambre indefinida. Estos huelguistas reclaman por reivindicaciones en un departamento sumido en la pobreza extrema. Los jóvenes se encuentran concentrados en el parque Simón Bolívar de Riohacha. Ya una joven huelguista ha sufrido problemas de salud después de varios días de huelga, y como ellos dicen en uno de los mensajes que tienen en el parque: “La Guajira muere de abandono”.
Después de regresar del torneo, Valderrama presentó a Luis al equipo Junior de Barranquilla para que fuera contratado y se continuara con su dieta para que continuara ganando peso y masa muscular. Del Junior pasó al Porto de Portugal, uno de los equipos más importantes de este país europeo, donde se ha convertido en una de sus figuras. Habrá que esperar si después de su actuación en la copa América cambiará de equipo y mejorarán los ingresos económicos que le ayudaran a tener una mejor calidad de vida.
La historia de Luis Díaz refleja lo que millones de jóvenes en estos días de paro le reclaman a los gobernantes; tener la “oportunidad” de poder mostrar sus habilidades deportivas, artísticas o académicas, y que para poder ser alguien en Colombia no sea exclusivo tener un poder económico, de apellidos o contactos para poder alcanzar sus metas. Somos un país donde la gran mayoría vive del rebusque, empleos por obra o por prestación de servicios, que no garantiza un salario digno o, al menos, que sea constante y suficiente para poder cubrir nuestras necesidades básicas. La precarización del trabajo en Colombia no permite pensar en el acceso a la educación universitaria y poder pagar una institución privada, porque en las públicas es casi imposible, ya que los cupos son mínimos y la mayoría de los jóvenes son excluidos del sistema.
Otro gran mito que debemos acabar es el de “lo quieren todo regalado”. Eso es FALSO, los seres humanos no queremos que nos regalen nada simplemente porque todos tenemos las capacidades para esforzarnos y alcanzar nuestras metas. Lo que necesitamos es que se nos brinden las oportunidades para desarrollar nuestras potencias. Por eso, desde este espacio reclamamos: MAS OPORTUNIDADES PARA LOS LUCHOS DE LA RESISTENCIA EN TODOS LOS RINCONES DEL PAÍS.
